La startup valenciana Nothingbutnet S.L., vinculada al Parc Científic de la Universitat de València y ganadora del VLC/STARTUP 2015, lanza hoy la tecnología Nagi, un dispositivo basado en recepción de señal bluetooth que ayuda a los socorristas a evitar posibles ahogamientos en piscinas. La apertura comercial tiene lugar después del éxito de la investigación que se ha desarrollado durante un año en la piscina municipal de Paterna (Valencia), donde se ha estado probando en grupos de riesgo.
Nagi –que significa nadar en esperanto– requiere la instalación de un conjunto de localizadores que rodean la piscina y la colocación de pequeños dispositivos emisores de señal Bluetooth en el gorro o en las gafas de los nadadores. Definido un periodo de tiempo máximo en segundos en que un nadador puede permanecer sin moverse, el sistema alerta al socorrista mediante un smartwatch y una tablet. Asimismo, le indica donde se ubica su cuerpo en el agua.
“El umbral de la alerta dependerá del riesgo del grupo de población. Nosotros podemos detectar la sumersión del cuerpo desde el primer segundo. Sonará una alerta visual y sonora tanto en el reloj del socorrista como en la tablet”, explica Javier Bosch, CEO de Nothingbutnet. Según la Organización Mundial de la Salud, el ahogamiento es la tercera causa de muerte por traumatismo no intencional en el mundo.
Múltiples ventajas
Las ventajas de este dispositivo son diversas en comparación con otros sistemas tecnológicos anteriores, basados en cámaras de video subacuáticas. “Es más barato y fácil de instalar, pues tan solo requiere cinco noches de trabajo y no es necesario vaciar la piscina. Además, el tiempo de detección es más rápido. Los sistemas anteriores requieren que la persona se hunda y se vaya al fondo, lo que ocurre en unos 30 segundos. En cambio, Nagi detecta hundimientos, pero también cualquier interrupción anómala del movimiento, por tanto, puede alertar también de ahogamientos en superficie”, explica Javier Bosch. “Salva la vida y además”, añade, “tendrá un uso motivador y divertido, puesto que proporcionará información de lo que has nadado, datos que los otros sistemas de detección de ahogamiento no facilitan”.
Se calcula que el coste de esta tecnología para una piscina de 25 metros de largo es de aproximadamente 25.000 euros al año. “Varios municipios españoles han manifestado ya su interés por Nagi, así como el estado de Israel. Este año vamos a empezar a instalarla en piscinas cerradas. Y el próximo año en abiertas y domésticas”, señala el CEO de Nothingbutnet. Paterna (Valencia), el primer municipio en instalar este sistema, es candidata a ser European City of Sport, entre otros motivos, por el uso de Nagi.
Ganadora del VLC/STARTUP
La tecnología Nagi es la tercera línea de producto que saca a la venta la empresa Nothingbutnet S.L., fundada hace 3 años por seis socios y ganadora del concurso VLC STARTUP 2015 que impulsa la Universitat de València a través de su Parc Científic para el desarrollo de empresas innovadoras y/o de base tecnológica en el entorno de VLC/CAMPUS. Inicialmente enfocada al mundo del baloncesto, en este deporte ha desarrollado dos tecnologías de digitalización (NBN23 Competition y NBN23 Performance) orientadas a monitorizar el movimiento de los jugadores y a potenciar el espectáculo con el suministro de información relevante en tiempo real. De hecho, la técnica desarrollada para identificar la ubicación en pista de los jugadores en cada momento es la que ha permitido desarrollar Nagi en las piscinas.
Nothingbutnet S.L., que hoy cuenta ya con 42 socios, ha ampliado recientemente su capital en 500.000 euros y espera volver a aumentarlo a finales de año. Parte proviene de business angels del mundo del deporte, entre los que se encuentran seis jugadores de baloncesto internacionales que han jugado o están jugando en la selección española de baloncesto. También ha entrado en su accionariado Shorai, un nuevo grupo inversor valenciano que aglutina a figuras de otras disciplinas, como el tenis, el fútbol o la natación.
La startup valenciana cuenta con más de cinco premios nacionales e internacionales, entre los que se encuentra también el primer premio HYPE a nivel europeo como Mejor Proyecto de Innovación Tecnológica del 2016, cuya final se celebró en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro 2016.