El proyecto Medsealitter sobre impacto de la basura marina en el Mediterráneo concluye con una exposición en el Museo de Ciencias Naturales

01/08/2019

El Institut Cavanilles de la Universitat de València (ICBiBe) y la Conselleria de Agricultura y Transición Ecológica han inaugurado este jueves 1 de agosto la exposición ‘Sin azul no hay verde’, última acción de divulgación del proyecto europeo Interreg Medsealitter. La muestra, ubicada en el Museo de Ciencias Naturales de Valencia (Jardín de los Viveros) pone de relieve tanto las amenazas que sufre el Mediterráneo como los tesoros que conserva.

El mar Mediterráneo es uno de los puntos calientes de biodiversidad del mundo, pero también es uno de los mares más contaminados. En él, más de 260 especies ingieren basura marina, es decir residuos plásticos, líneas de monofilamento, goma y papel de aluminio. El problema afecta particularmente a peces, cetáceos y tortugas marinas, animales en cuyos tratos digestivos aparecen desechos de micro y macroplásticos engullidos accidentalmente.

La Directiva Marco de la Estrategia Marina europea considera la basura marina como uno de los más graves contaminantes del Mediterráneo. También en el Convenio de Barcelona, firmado por diferentes países, entre ellos España, se subraya la necesidad de controlar la contaminación marina con el fin reducir drásticamente el riesgo para la biodiversidad mediterránea.

La Unidad de Zoología Marina del Instituto Cavanilles de Biodiversidad y Biología Evolutiva (ICBiBe) de la Universitat de València, en el Parc Científic de la institución, en colaboración con la Conselleria de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica, ha participado en Interreg MEDSEALITTER, un proyecto europeo para el muestreo y cuantificación de las basuras marinas en el Mediterráneo, que tiene como principal objetivo desarrollar, probar y aplicar protocolos eficientes y rentables para analizar y gestionar el impacto de la basura en la biodiversidad del mar. Se trata de un proyecto piloto, implementado en cuatro países –Italia, Francia, España y Grecia–, en el cual participan 11 socios.

Interreg Medsealitter se puso en marcha en 2016 y concluye ahora con resultados contundentes, tras cuantificar la ingesta de desechos marinos en tortugas bobas recolectadas a lo largo de 20 años (1995-2016) en aguas del Mediterráneo occidental; y deja establecido un protocolo estandarizado común que fortalece la efectividad de los planes destinados a buscar soluciones al problema del impacto de la basura marina en la biodiversidad de la cuenca mediterránea.

En torno a todas estas cuestiones gira la exposición ‘Sin azul no hay verde’, inaugurada este jueves de la mano de la concejala de Patrimonio y Recursos Culturales, Gloria Tello, el vicerrector de Investigación de la Universitat de València, Carlos Hermenegildo, la consellera de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica, Mireia Mollà, y el alcalde de Valencia, Joan Ribó, así como por el propio comisario de la muestra, el biólogo Juan Antonio Raga.

Esta acción de divulgación pone punto y aparte a un proyecto destinado no solo a analizar y cuantificar el impacto de la basura marina en el Mediterráneo, sino también a transmitir a la sociedad la necesidad de recular y de contribuir a la protección y la conservación del patrimonio natural.

La exposición permanecerá abierta al público en el Museo de Ciencias Naturales de Valencia hasta el próximo mes de octubre.